Todo eso que tanto nos gusta (Pedro Zarraluki) No siempre es fácil ser padre. Tampoco es fácil ser hijo.. en realidad, nada es fácil en esta vida... y ahí está la clave de la comedia. La dificultad acaba convirtiéndose en el corazón mismo del placer de vivir. Un anciano se escapa en busca de un palacio inalcanzable, y su hijo va tras él. En su huida se encontrarán con una chica que está segura de amar para siempre; con una mujer perturbadora que vive sola con su mayordomo y su cocinera napolitanos; con una ciega que nunca quiso trabajar y acabó cultivando las rosas más bellas... Padre e hijo comprenderán que vivir puede ser apasionante si se sabe mirar a los demás, hacerse cómplice de ellos. Si se sabe no tener miedo al ridículo, al miedo mismo. Y que es, al fin y al cabo, la única oportunidad que tenemos de dar un pequeño paseo por el paraíso. Así empieza... Mi padre se escapó de casa un día de sol radiante. Más que escaparse de casa, pues la que tenía no merecía tal nombre, se escapó de su propia vida y lo hizo de la única forma que podía sin atentar contra sí mismo. Se subió al coche y desapareció. Andaba mediado el mes de abril. Yo tardé en preocuparme porque Cristina, mi madre, no me dio la noticia hasta una semana más tarde. Me llamó a las ocho de la mañana, la hora en que, ella lo sabía, me iba a sorprender escuchando la radio en la cama, y me dijo que su marido le había dejado una nota rarísima. |
Rompiendo normas: Innovación literaria
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Cuando se domina una profesión, se puede realizar el capricho que uno
imagine. En el caso de la arquitectura resulta muy evidente. En literatura
suced...
Hace 4 días
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