viernes, 7 de septiembre de 2007

lecturas 2007 - I

Los maestros de la República (Mª Antonia Iglesias)

“¿Quién “canonizaría” algún día a estos otros santos mártires, que fueron los maestros republicanos y que nunca entrarán en el “santoral” ni en la memoria de la Iglesia? ¿Quién hablaría de ellos? ¿Quién les reconocería la labor generosa y ejemplar que llevaron a cabo con tanto esfuerzo y sacrificio?”. Estas provocadoras preguntas son las que se hizo María Antonia Iglesias hace un tiempo. Las respuestas las encontrará el lector en este conmovedor y necesario libro que, por encima de todo, quiere ser un rendido homenaje a los maestros de la República, luchadores comprometidos contra el atraso y la incultura que fueron asesinados por defender la causa más preciada de la República: la enseñanza.
Diez historias heroicas, ocurridas en distintos pueblos de España, de las que dan testimonio con dolor y rebeldía, hijos, nietos, amigos y, sobre todo, antiguos alumnos de las víctimas. Todos ellos aceptaron generosamente el reto propuesto por la autora: hablar con ella acerca de la vida ejemplar y la muerte, alevosa y cruel, de los maestros.
Un regalo para la "memoria histórica".
Me inspiró ternura, mucha ternura. Las historias de estos mártires cuya único crimen fue el de ofrecer una educación en libertad.
Nunca un libro había hecho que las lágrimas resbalaran por mis mejillas...

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo leeremos amiga, efectivamente fue una epoca dura para mucha gente, sufrieron mucho, hay otro libro que se llama "las trece rosas", no recuerdo quien lo escribio, pero es una preciosidad, pena... que fueran historias reales, pensar que eran nuestros antepasados quienes sufrieron tanto, rompe el corazon en mil pedazos. Un beso fuerte

Anónimo dijo...

Como esto de la Internés vale pa casi todo, estuve mirando el libro que me dices y es de Carlos Fonseca, y tiene una pinta estupenda, así que pasará a formar parte de mi lista de "libros por leer"
gracias
besitos

dunna dijo...

Fijaté que tuve este libro hace poco en mis manos y no me lo llevé... Gracias por hablar de él, ya tengo otro libro pendiente que leer.

 
Elegant de BlogMundi